Gildardo Gómez 185
Int. 13, Colima, Col.
312 107 6361
Llama y agenda
Lun - Vie: 9:00 - 19:00
Agenda tu cita
Int. 13, Colima, Col.
Llama y agenda
Agenda tu cita
La braquioplastia es una intervención destinada a tratar la flacidez y el exceso de grasa de la cara interna de los brazos. Con el paso de los años o tras haber perdido mucho peso, la piel de los brazos puede dar un aspecto de flacidez. Cuando ésta es pronunciada no existe ningún tratamiento que sea eficaz salvo la cirugía.
Existen 3 grados de defectos del contorno de los brazos:
-Grado I, en que los cambios son incipientes y suele ser suficiente con una liposucción. Al eliminar el exceso de grasa de la cara interna, la piel se retrae.
-Grado II, donde ya la flacidez es intermedia. Se suele indicar un estiramiento cutáneo dejando la cicatriz circunscrita a la axila.
-Grado III, que son casos más avanzados, donde es necesario hacer una cicatriz longitudinal en la cara interna de los brazos hasta el codo.
¿Quién es el candidato ideal para someterse a una braquioplastia?
Cualquier paciente que haya sufrido cambios importantes de peso o que por el paso de los años presente una flacidez cutánea relativamente importante o un acúmulo de grasa localizado en la cara interna de los brazos. Según el grado de afectación se le recomendará una de las tres alternativas. Se intentará indicarle la técnica de menor cicatriz.
La primera consulta
Si usted ha decidido realizarse una braquioplastia lo primero que ha de tener en cuenta es elegir un cirujano plástico cualificado, que esté en posesión del título oficial de cirugía plástica y que tenga experiencia en este tipo de intervención.
Durante la primera consulta usted debe tener la convicción de que su cirujano ha entendido perfectamente lo que usted desea, que le explica de forma clara en qué consiste la intervención y que le está dando una visión completa de todo el proceso, desde que usted acude al hospital hasta que se le da de alta definitiva unos meses después.
Su cirujano plástico le hará unas preguntas sobre su salud en general y sus expectativas respecto a esta intervención. A continuación, le hará un examen de los brazos y le aconsejará la mejor opción para usted. Según sus necesidades se le recomendará extirpar piel o hacer una simple liposucción. La elección se decidirá conjuntamente entre usted y su cirujano. Se le explicará el tipo de anestesia, que suele ser local y sedación, en régimen ambulante. Hemos comprobado que esta técnica es suficiente y segura.
Finalmente se le dará un presupuesto y una solicitud de pruebas preoperatorias consistente en un análisis completo de sangre y un electrocardiograma.
La segunda consulta
Si su cirujano le ha parecido el apropiado, su plan quirúrgico coincide con sus expectativas y el presupuesto le parece razonable, deberá acudir por segunda vez a su consulta ya con las pruebas preoperatorias realizadas para comprobar que su estado de salud es bueno.
En esta segunda visita se le darán las instrucciones preoperatorias, se le harán unas fotos de ambos brazos, deberá leer y firmar los consentimientos informados y se fijará una fecha para la intervención.
En las instrucciones se le advierte que debe estar en ayunas desde 6 horas antes de la operación y que debe evitar ingerir fármacos que contengan ácido acetilsalicílico (aspirina, couldina, etc.) desde 10 días antes hasta 5 días después de la cirugía.
El día de la intervención
Al tratarse de una intervención ambulatoria no precisa ingresar en una habitación del hospital. Su cirujano le recibirá en una sala anterior al quirófano, donde le marcará con rotulador el área a intervenir. La operación dura entre 1 y 2 horas. Usted se encontrará sedado, por lo que no percibirá ningún tipo de dolor o molestia.
Tras la intervención, el paciente vuelve a la sala previa al quirófano, donde permanecerá el tiempo necesario hasta que se recupere completamente. Se le colocará una venda compresiva en ambos brazos y se le administrarán analgésicos para que se encuentre bien. Al día siguiente esa venda será substituida por una faja, que deberá llevar durante al menos 2 semanas.
Cuando ya se le de el alta podrá volver plenamente consciente a su domicilio. Al día siguiente acudirá a nuestra clínica donde el cirujano le realizará la primera cura y observará su evolución.
El postoperatorio
Durante los primeros días el paciente notará un dolorimiento moderado en el área intervenida que requerirá tomar analgésicos durante unos días. El uso de la faja de forma continuada ayuda que la inflamación inicial vaya remitiendo poco a poco. Los primeros días se deberán evitar ciertas actividades, como conducir o levantar grandes pesos. Cada día el paciente se encontrará mejor, pudiendo reincorporarse a su vida laboral entre la primera y la segunda semana del postoperatorio. Durante el primer mes se han de evitar las actividades físicas extenuantes, como correr o ir al gimnasio.
Se le hará un tratamiento específico de la cicatriz mediante la aplicación de láminas de silicona durante los primeros dos meses, para que estas evolucionen lo mas rápidamente posible. Al año de la intervención apenas suelen ser perceptibles, sobre todo las que quedan dentro de la axila.
¿Existen complicaciones?
Cuando la intervención es realizada por un cirujano plástico cualificado los resultados suelen ser buenos. Como en cualquier procedimiento quirúrgico, pueden presentarse potenciales complicaciones (infección, hematoma, etc.). Si su cirujano tiene la experiencia adecuada cualquier complicación será menor.
El resultado
La braquioplastia se puede considerar como una intervención definitiva. Aunque el paciente aumentara de forma notable su peso durante los años posteriores, el aspecto de los brazos permanecerá estable en el tiempo. Así mismo, las cicatriz será cada vez menos apreciable. Toda la información que le hemos ofrecido tiene carácter general, debiendo ser personalizada en cada caso concreto. Por ello es esencial que su cirujano plástico le aclare cualquier tipo de duda que usted pudiera tener el día de la consulta.